REDES- Revista hispana para el análisis de redes sociales
Vol. 20, #1, Junio 2011
http://revista-redes.rediris.es

Cohesión, Vinculación e Integración sociales en el marco del Capital Social*

Carlos Lozares, Pedro López Roldán, Joan Miquel Verd, Joel Martí – QUIT,  Departamento de Sociología[1], (UAB)

 José Luis Molina – Egolab, Departamento de Antropología social y cultural (UAB)[2]

Resumen

El objetivo de este artículo consiste en identificar, definir y engranar en un modelo unificado conceptos tales como Interacción-relación, Capital social y otros Capitales; Cohesión, Vinculación e Integración sociales; Bonding, Bridging y Linking desde una perspectiva de redes sociales. Estos conceptos que tienen entidad  propia han sido estudiados bien de manera independiente bien apareados. Además, relacionada con estos conceptos, existe una constelación de otros muchos como por ejemplo solidaridad, confianza, roles, valores comunes, reciprocidad, exclusión, inclusión y segregación. Estos conceptos se resitúan en el modelo conceptual propuesto.

Palabras clave: Interacción-relación- Capital social- Cohesión- Vinculación e Integración sociales- Bondig- Bridging- Linking- Redes sociales.

Abstract

The aim of this paper is to identify, define and engage in a unified model related concepts such as interaction, social capital and other capitals, Cohesion and Integration Linking social Bonding, Bridging and Linking and Social Networks from the perspective of social networks. These concepts have been studied in its own right independently or paired. In addition, related to these concepts there is a constellation of many others such as solidarity, trust, roles, shared values, reciprocity, exclusion, inclusion, segregation that are being repositioned in the proposed conceptual model.

Key words: Interaction-relation- Social Capital- Cohesion- Linking and social Integration- Bondig- Bridging- Linking- Social Networks.

1.   El Capital social,  contenido y forma relacional

1.1. Los tres pilares del Capital social

Bourdieu (1986) y Coleman (1988) son los autores pioneros en la teorización e investigación sobre el Capital social. Entre ambos hay préstamos conceptuales si bien sus bases teóricas son diferentes. Bourdieu influirá tanto en Burt (1997), más centrado en una perspectiva reticular del Capital social, como en Portes (1996). Coleman (1988) influye también en Burt (1997) así como en Putnam (1993, 1995). Putnam apuntala y divulga el concepto de Capital social centrando sus contenidos en la confianza mutua y las normas en grupos, asociaciones y sociedades.

Para Bourdieu (1986) el Capital social consiste en el conjunto de recursos reales y potenciales vinculados a la posesión de una red durable de relaciones más o menos institucionales que procura beneficios de reconocimiento mutuo. Se constituye y funciona por conexiones o redes sociales estables y se transforma en bienes del grupo o clase como por ejemplo en capital económico llegando incluso a institucionalizarse en títulos nobiliarios (Bourdieu y Wacquant, 1992).

Coleman (1990) define el Capital social por su función. El Capital social no contiene una sola entidad sino una variedad de entidades pero con la característica común de constituir algún aspecto de la estructura social y de facilitar acciones, intereses y recursos en Capital humano para los individuos dentro de la estructura. En este sentido el Capital social es una estructura relacional y funcional (Adler et al. 2000, 2002). Dentro de este marco genérico Coleman analiza el Capital social examinando su cierre a partir de las relaciones internas de los individuos o colectivos, introduciendo así la idea de identidad, pertenencia o inclusión social tal y como muestra en sus estudios sobre las familias, instituciones escolares o los joyeros judíos de Nueva York.

Putnam, por su parte, define el Capital social a partir de los rasgos de las organizaciones sociales como lo son las redes, normas y confianza mutua que facilitan la coordinación, cooperación y la reciprocidad generalizada y los beneficios colectivos en vista a asegurar bienes económicos o el mismo funcionamiento de la democracia (Putnam 1993, 1995, 2001; Inglehart 1997). El Capital social se refiere a colectivos, comunidades y ciudadanía en general, pero como agregación de bienes individuales (Flores y Rello 2002).  Su visión no se basa en el conflicto de intereses sino por el contrario en el consenso y los acuerdos basados en la confianza (Chiasi 2004,  Winter 2001).

En cuanto a la similitud y diferencias entre ellos, Coleman (1990) y Bourdieu (1986) sitúan el Capital social en las redes y subrayan la importancia de su inclusión y mantenimiento. En Putnam el sujeto del Capital social es colectivo, como las asociaciones, regiones o la misma sociedad; por su parte, para Bourdieu el sujeto es la clase social y para Coleman la estructura (Winter 2001). Coleman y Bourdieu ven en el Capital social un valor instrumental y/o un recurso para otras finalidades; Putnam lo ve como un bien expresivo en sí y como base de la democracia. Bourdieu fundamenta la génesis y dinámica del Capital social en la teoría de campos como condición de su producción o reproducción, mientras que Coleman y Putnam no abordan una teoría tan comprehensiva.

En estas condiciones, una visión unificada del Capital social o al menos un mínimo común denominador del mismo dada la variedad conceptual existente, aparece como necesaria. Nuestra propuesta consiste en identificar ese común denominador en la estructura de relaciones/redes que se configuran en instituciones, asociaciones y organizaciones a partir de una base sustantiva constituida por la confianza, la reciprocidad y las normas compartidas.

1.2.       La identidad y la dualidad inherente al Capital social

El Capital social como forma y contenido

Para articular mínimamente el conglomerado de conceptos que intervienen en la definición del Capital social hacemos una distinción básica que consiste en diferenciar su componente formal --constituido por las interacciones y/o relaciones  que asume la idea de red habitual en las definiciones de Capital social-- de su componente sustantivo, que consiste en contenidos de confianza mutua, reciprocidad generalizada y normas, pero también solidaridad, accesibilidad,  fiabilidad y otros que serán añadidos. Desde nuestra perspectiva el Capital social consiste precisamente en la convergencia de estas dos dimensiones en un compuesto indisociable. No hay relación o red sin contenidos y no hay recursos con contenido que, en pertinencia sociológica, no tengan su reflejo o se basen en unas relaciones-interacciones y, por ello, en una red. Este componente formal del Capital social la red y su correspondiente estructura, es también un recurso de los individuos y colectivos; precisamente es lo que da pie y forma a las posiciones o estatus sociales diferenciados de los individuos y colectivos en la estructura de la red: la red pasa a ser la estructura formal del Capital social. El componente sustantivo de Capital social consiste pues de recursos de cualquier naturaleza apropiados o en vista a su apropiación por individuos o colectivos que participan en las interacciones o relaciones. Esta dualidad y conjunción entre ambos componentes, básica desde nuestra perspectiva, se encuentra también como veremos, si no tan explicitada, en la literatura del Capital social.

El Capital social como contenido sustantivo

Algunos autores enfatizan más el componente sustantivo del Capital social como recursos atribuidos a los individuos y/o colectivos con contenidos tales como confianza mutua y reciprocidad con sus expectativas, normas y valores comunes y compromiso participado. Para Fukuyama (1995, 1997) el Capital social es la capacidad de la gente para trabajar juntos con propósitos comunes en grupos y organizaciones con el consiguiente conjunto de valores o normas participadas entre sus miembros. Inglehart (1997) considera el Capital social como cultura de la confianza y tolerancia de la que emergen redes extensas de asociaciones del voluntariado. Portes y Sensenbrenner (1993) lo ven como expectativas para la acción dentro de una colectividad con respecto a objetivos económicos o a otros bienes. Thomas (1996) habla del Capital social como acciones y procesos llevados a cabo en sociedad civil para promover el desarrollo de la colectividad global. Autores que enfatizan también dicha versión sustantiva-atributiva son Portes (1998), Putnam (1995) y Brehm et al. (1997).

Una mayor centralidad del Capital social en el componente  relacional o redes

Como se ha señalado, Bourdieu toma las relaciones como base explicativa de las diferencias de poder, desigualdades e injusticias económicas. El Capital social es un recurso de clase social en cuanto que existe una red estable de relaciones más o menos institucionales que procura beneficios de reconocimiento mutuo a la clase. De alguna manera se basa en la visión formalista de Simmel, en el sentido de que la estructura de las redes genera su propio contenido y su sistema de roles. Decíamos que para Coleman (1990) y Bourdieu (1986) el Capital social está en la red. Coleman asume esta implicación necesaria de las redes y su estructura pues el Capital social está localizado en alguna de las características de la estructura de la red, evidentemente en una red con contenidos. Granovetter (1973, 1974) introduce y enfatiza la idea de las relaciones débiles como fuente de Capital social  poniendo como ejemplo los procesos de inserción laboral. Para Burt (1992) el Capital social está constituido por amigos, colegas y más en general contactos con los que se puede tener oportunidades financieras o de Capital humano. Knoke (1999) lo considera como un proceso por el que los actores crean y movilizan sus conexiones reticulares dentro y entre organizaciones para conseguir acceso a los recursos de otros actores. Portes (1998) lo contempla como capacidad/habilidad de los actores para asegurarse beneficios por pertenecer a redes sociales. Baker (1990) lo considera como un recurso que los actores extraen de estructuras sociales específicas y que usan para sus intereses; se genera por los cambios de las relaciones entre actores. Brehm y Rahn (1997) lo ven como un tejido de relaciones cooperativas entre ciudadanos facilitando así la resolución de problemas de la acción colectiva. Loury (1992) lo identifica como relaciones que suceden naturalmente entre personas y que por ejemplo ayudan a la adquisición de habilidades valorados en el mercado del trabajo.  Para Nahapiet y Ghoshal (1998) es la suma de los recursos potenciales y reales, implicados y disponibles que provienen de la red de relaciones que tiene un individuo u otras entidades sociales. Pennar (1997) lo considera como redes que además pueden ser movilizadas. Para Borgatti, Jones y Everett, (1998), Adler et al. (2000, 2002), Lin (1999; 2001), entre otros autores que se entroncan más claramente en esta perspectiva, el Capital social es un tejido reticular de relaciones sociales que influye en el comportamiento individual y afecta también el desarrollo económico.

1.3. La propuesta sobre la identidad del CS como distinción y conjunción entre forma y contenido

Como premisa inicial el Capital social no puede desvincularse de las ideas de Campo y Valor social en el sentido de Bourdieu. El Campo social consiste en la dinámica interactiva que opera entre agentes de diversos dominios como el económico, cultural, familiar, político o artístico, cognitivo, etc. para la primacía y/o beneficio que se produce. El Valor social es el resultado, bien o recurso, que produce la dinámica interactiva del Campo social. La dinámica del Campo consiste en interacciones reales de los agentes por la apropiación del Valor generado por la misma interacción y de los procesos consiguientes de tipo intencional y estratégicos. El Capital social consiste, cualquiera que sea el contenido que conlleve (económico, informativo, sostén y apoyo, artístico…) y por tanto en el Campo en que se aplique, en la apropiación de los resultados que produce la dinámica interactiva o relaciones. Por las diferencias que genera esta apropiación y por provenir de la interacción entre agentes, el Capital social adquiere pertinencia social. El Capital social es pues un resultado, diferencialmente distribuido entre los agentes o grupos, y manifestado por el estatus o posición en la red. Al ser un recurso diferencial entre agentes está en el germen de la generación del ego, del nosotros y de los otros, como entidades e identidades sociales. El sustrato sustantivo del Capital social son las relaciones-interacciones que constituyen su estructura; pueden ser capital económico, cognitivo, etc. En el Capital social no se puede deslindar pues el componente relacional del sustantivo.

Entre la diversidad de contenidos de los Campos, Valores y Capitales hay tres que juegan y han jugado una función fundamental: los de Capital de Utilidad funcional (CU) o Uso-Función, el Capital Económico (CE) o de Cambio y el Capital Cognitivo (CC) o de Signo-Cognitivo. Cualquier Campo, Valor y Capital por ejemplo el artístico o el de la ciencia, contiene componentes sustantivos de algunos de los otros tres, no necesariamente en la misma proporción. El Capital social es social o tiene pertinencia social no sólo por su contenido sustantivo sino por las interacciones que supone y conlleva, su dinámica y las apropiaciones que generan. Es social, primero porque proviene de interacciones entre agentes y, segundo, porque tales interacciones o relaciones, ingrediente básico de todo Capital cualquiera sea su contenido, genera nuevas realidades sujetas a apropiación social; esto es, genera diferencias relacionales entre individuos y grupos (Figura 1).

Figura 1. De los diversos tipos de Capitales al Capital social. Elaboración propia

La definición de Capital Social como “confianza y/o fiabilidad mutuas, normas de reciprocidad y las redes de compromiso civil” contiene algún grado de ambigüedad y no poca superposición conceptual. De entrada es una yuxtaposición conceptual sin articular. Por un lado, la confianza y/o fiabilidad mutua y las normas de reciprocidad son contenidos cognitivos vinculados a las representaciones, expectativas y estrategias; son Capital social porque se originan en relaciones-interacciones sociales y porque se distribuyen entre los individuos de manera diferencial. Las redes de compromiso civil o apoyos mutuos son netamente interacciones objetivables; en este sentido son Capital Social. La conjunción de las dos instancias constituye el Capital Social (Cf. Lozares 1996, 2003, 2006, 2008; Marti y Lozares, 2008). La identidad que damos al Capital social consiste en distinguir las dos instancias o componentes y al mismo tiempo conjugarlas.

2. La distribución del CS en Bonding, Bridging/Linking[3] como componente relacional/reticular

2.1. Del componente relacional-reticular del CS y su distribución en Bonding, Bridging/Linking

La red de relaciones intra, hacia dentro o cierre de la red: los Bonding como forma de distribución del CS

Definido un colectivo (grupo, asociación, organización, población, atributo), las relaciones bonding consisten en las interacciones que llevan a cabo intra (entre o dentro de) los miembros del colectivo. El número y frecuencia de los bonding puede ser más o menos densos lo que da una mayor o menor valor al Capital social. Como se viene afirmando, los contenidos de las relaciones pueden ser diversos --aunque se asocian más a la confianza. En este sentido se puede hablar de relaciones bonding de carácter económico, informativo, de apoyo mutuo material o instrumental; pueden ser de naturaleza más objetivada o cognitiva. Los bonding adquieren su máximo valor en situaciones de clausura completa o de máxima densidad. Los bonding son relaciones-redes de tipo horizontal en el sentido de que son relaciones entre agentes equivalentes socialmente (Adler y Kwon, 2000; 2002). Los agentes de colectivos cerrados y densos en relaciones bonding están muy interconectados, lo que facilita, o son resultado de, contenidos en normas comunes, comunicación, confianza y apoyo mutuo, denominados relaciones fuertes (Coleman, 1998; Putnam 1993, 1995, 2001) procurando además efectividad de las instituciones democráticas y la coordinación y cooperación en beneficio mutuo. Los bonding como Capital social pasan a ser un recurso interno de un colectivo del que se benefician los individuos (Pöyhönen 2005; Lin 1999, 2001). Son pues, como hemos dicho, relaciones hacia dentro o intra (Borgatti, Jones y Everett, 1998) de los colectivos contribuyendo y constituyendo su estructuración interna (Atria, 2003).

Para Bourdieu (1986) la internalidad que suponen los bondings, como fuente Capital social con contenidos de confianza, autoridad y normas propias, pasa a ser una inversión y recurso en reconocimiento mutuo, reproducción y preservación de la posición dominante como grupo y de sus valores expresivos e identitarios, por ejemplo en la reproducción de la nobleza.

Coleman (1988) vincula los bonding de redes densas a la integración de las comunidades locales pues facilitan el re-conocimiento entre actores, la confiabilidad y las normas efectivas así como los objetivos comunes. El empoderamiento y el liderazgo son efecto de este tipo de Capital social lo que facilita recursos para una comunidad (Atria, 2003). Esta visión internalista se suele asociar tanto a beneficios instrumentales como expresivos, aunque más a los segundos, en grupos y entornos cooperativos.

La red de relaciones entre o hacia fuera o la apertura de la red: los Bridging/Linking, como forma de distribución del Capital social

Los Bridging/Linking[4] tienen que ver con las relaciones externas, es decir con las  que se dan entre individuos de colectivos diferentes. Los colectivos pueden ser, de nuevo, grupos, organizaciones, instituciones, asociaciones…) y están delimitados por fronteras y/o características de los individuos. Las relaciones hacia fuera, extra o inter grupos, se oponen a las de clausura o de relaciones internas y suponen el acceso a colectivos de pertenencia o referencia distintos del propio y en consecuencia a otros recursos del Capital social.

Los Bridging/Linking llaman a la intermediación entre colectivos o individuos diferentes; facilitan los cambios de normas del grupo propio y las alianzas exógenas, la competición o colaboración con los diferentes; procuran nuevas fuentes de información e innovación; y, por fin, representan oportunidades para los intermediarios y los que ocupan agujeros estructurales. Burt (1992, 1997) examina tal información y/o el poder, por ejemplo económico de individuos que ocupan las posiciones de intermediación o de agujero estructural. 

Los Bridging/Linking se asocian más a connotaciones instrumentales y competitivas que a expresivas y cohesivas (Johanson, 2001).  La  clausura total de los bonding no es realista, incluso en contenidos expresivos; siempre hay puentes externos que con una función más instrumental aportan recursos sin necesidad de conexiones fuertes (Lin 1999, 2001).

2.2. Las situaciones límites no son moneda corriente

Entre los Bonding o los Bridging/Linking, ‘hacia dentro’ o ‘hacia fuera’: ni el cierre absoluto ni la apertura total o el valor del Capital social en situaciones intermedias  

El cierre completo de un grupo o colectivo ni es realista ni es necesario para su supervivencia o progreso, ni posiblemente es la manera social más benéfica de distribución del Capital social. Los bonding, inclusivos y excluyentes, tienen su desventaja por sus efectos redundantes. Los Bridging/Linking externos pueden ser disolventes de un colectivo o grupo pero pueden aportar recursos diferentes sin necesidad de conexiones fuertes. La cuestión es saber, para un colectivo o sociedad, qué balance entre ambos y en qué condiciones le procura más y mejores beneficios y con qué finalidad pues ambos no son incompatibles (Adler y Kwon 2000; Lin 1999, 2001; Borgatti, Jones y Everett 1998; Narayan 1999). El paso de lo unificado, común y homogéneo propio a la clausura, internalidad y cohesión a la variedad, diversidad, heterogeneidad y externalidad es el tránsito de los Bonding a los Bridging/Linking. Las relaciones Bonding y Bridging/Linking parten de colectivos pero también los refuerzan y/o debilitan pero de todas maneras son formas de distribución del Capital Social y, por tanto, uno de los componentes de la estructura reticular. 

La distribución entre ambos tipos de relaciones aparece en el esquema de Borgatti et al. (1998) que reproducimos y ampliamos por nuestra parte en el Cuadro 1. Si se toma el individuo como unidad de análisis o soporte del Capital social dentro de un colectivo, las relaciones de cada individuo con los de su colectivo son relaciones externas o exógenas. En este sentido, las relaciones del individuo, en tanto que unidad diferenciada de las otras unidades del colectivo son relaciones Bridgin/Linking. Existen muchos indicadores de tales relaciones como los agujeros estructurales, brokers, intermediación, centralidades individuales, entre otros. Son también relaciones Bridgin/Linking, las de un grupo y de sus unidades con respecto a otros grupos y sus unidades.

Veamos las diferentes posibilidades que ofrece un esquema con tres niveles (Cuadro 1). Dispuestos en vertical, se indican los niveles del Sistema de referencia (conjunto en el que se distribuye el del Capital Social o que abarca el análisis). Son tres, un Colectivo formado sólo de Individuos, un Colectivo de Grupos y el Colectivo formado por Individuos y Grupos. La Unidad de atribución o soporte puede ser variable: en el primer Sistema de referencia o nivel, esta Unidad es el (o cada uno de los) individuo. En el segundo Sistema o nivel, la Unidad es cada Grupo del colectivo. En el tercero se dan las dos posibilidades, los Individuos y/o Grupos como unidad de atribución o soporte. En horizontal aparecen las dos formas de distribución del Capital Social en Bonding y Bridging/Linking. Dentro de las casillas se muestran las diferentes situaciones.

 

LA ORIENTACIÓN DE LOS VÍNCULOS O RELACIONES EN EL ANÁLISIS

Sistema de referencia. Unidad de atribución o soporte de resultados

Hacia dentro: Bonding

 

Hacia fuera: Bridging/linking

1a) Sistema: colectivo de individuos. Unidad: el individuo

Vacío en la visión reticular

No pertinente

Ego-network, red personal. Análisis de centralidades, agujeros estructurales, brokers, cortes.

1b) Sistema: colectivo de  individuos. Unidad: el colectivo

Centralidad, densidad, componentes, cohesión, estructuras, flujos.

Vacío en la visión reticular

No pertinente

2a) Sistema: colectivo de grupos. Unidad: grupo del colectivo

(Relaciones entre grupos, no entre sus individuos )

Vacío en la visión reticular

No pertinente

Ego network de grupos en el sistema. Análisis de centralidades de cada grupo,  holes, brokers, puntos de corte.

2b) Sistema: colectivo de grupos. Unidad: el colectivo

(Relaciones entre grupos, no entre sus individuos )

Centralidad, densidad, componentes, cohesión, estructuras, flujos teniendo como unidad cada grupo

Vacío en la visión reticular

No pertinente

3) Sistema: colectivo de grupos. Unidades: individuos y grupos

(Relaciones entre grupo y entre  individuos )

i) Bonding en cada grupo del colectivo por relación entre individuos + su comparación.

ii) Bonding de todo el colectivo: relación entre  grupos al ponderar los Bonding internos de los grupos.

ii) Bridging entre grupos por  las relaciones que tienen entre sí sus individuos.

ii) Bridging entre grupos por las relaciones que tienen entre sí los grupos (como entidades).

Cuadro 1. Sistemas de referencia v. orientación de vínculos. Elaboración propia ampliada a partir de Borgatti et al. (1998)

 

3. La Cohesión social y sus Bonding, (relaciones hacia dentro) la Vinculación social y sus Bridging (relaciones hacia fuera pero horizontales) y la Integración social y sus Linking (relaciones hacia fuera pero verticales)

3.1. La Cohesión social con sus Bonding

La dificultad de una definición sustantiva de la Cohesión social (CoS)

¿Es la CoS un cuasi concepto? De todas maneras no es fácil definirlo como realidad social sustantiva (Levi, 1998), dado que se refiere a muchas acepciones y además admite grados de intensidad tal y como aparece en la literatura, por ejemplo, asimilando la Cohesión social al primer término de las disyuntivas siguientes: identidad v. distinción,  inclusión v. exclusión, igualdad v. diferencia, solidaridad v. egoísmo, homogeneidad v. heterogeneidad, uniformidad v. singularidad. Otra dificultad resoluble proviene de que la Cohesión social puede expresarse en contenidos o ámbitos diversos: cultural-educativo, político-ciudadano, económico-trabajo, entre otos y no sólo a partir de relaciones del tipo de sostén, apoyo o de confianza mutua. En cuanto a la dualidad de connotaciones (Amin 2002: 974) las resuelve con un equilibrado balance: ‘to strike a balance between cultural autonomy and social solidarity, so that the former does not lapse into separatist and essentialised identities and so that the latter does not slide into minority cultural assimilation and Western conformity’ (Cheong y alt. 2007). Los efectos diversos de estas connotaciones se han manifestado en políticas aplicadas a la inmigración según las épocas: a partir de los 1960 como integración social, asimilación, multietnicidad; en los 80 primó el multiculturalismo; los 2000 supone un cierto retorno al asimilacionismo y monoculturalismo aunque poniendo el énfasis fuera de las desigualdades económicas para centrarse en los valores y costumbres (Baker et al. 1999; Schuster y Solomos, 2004).

Los cambios y crisis sociales acaecidos estas últimas décadas han afectado de plano a la Cohesión social: declive de identidades y valores morales participados, otrora cemento de la sociedad, el crecimiento del crimen organizado, las tasas de desempleo prolongadas, la ruptura de vínculos familiares tradicionales, la aparición de tensiones y disrupciones a partir de globalización financiera, del mercado y de la producción, el individualismo social cara a la cohesión tradicional de los trabajadores, procesos de secularización (Castell, 1997). Hay autores que relativizan, sobre todo en las políticas migratorias, la predominancia absoluta de la Cohesión social por su posible connotación identitaria proponiendo la apertura a la sociedad de llegada (Amin, 2002; Arneil, 2006; Ben-Tovim, 2002; Forrest and Kearns, 2001; Salmon, 2002).

La Cohesión social como un conglomerado conceptual

Los autores que han tratado el concepto de Cohesión social lo identifican con un variado, aunque relativamente convergente, conglomerado conceptual recogiendo así las ideas centrales del Capital social en su expresión sustantiva. Para Moody y White (2003) la Cohesión social se identifica con los valores y propósitos comunes de una sociedad o colectivo como el sentido de la pertenencia y la solidaridad no obstante su diversidad; Woolley (1998) la considera como los valores participados e interacción social y ausencia de exclusión; Jenson (1998) como inclusión, participación, reconocimiento y legitimidad; Forrest y Kearns (2001) como valores y objetivos comunes, solidaridad social, redes y sentido de atracción e identidad vinculadas a un lugar o grupo; O'Reilly et al. (1977) como desarrollo de la conectividad; Festinger et al. (1950) como un campo de fuerzas para que los miembros permanezcan en grupo; Gross Martin (1952) como resistencia a fuerzas disruptivas de un colectivo; Beck, van der Maesen et al. (1997) como el proceso que genera redes sociales e infraestructuras que las sostengan para que los ciudadanos existan como sujetos reales humanos y sociales; para Luhmann, (1988) se trata de la confianza necesaria para arriesgarse y tanto más cuanto más lo hagan otros miembros del colectivo. Beck (1997) considera la Cohesión social como el pegamento que vincula la sociedad como conjunto, la solidaridad y las relaciones sociales, los valores e identidades: sin la Cohesión social no hay interacción y sin ella no hay identidad colectiva y vida social. Para Jeannotte (2003) la Cohesión social corresponde a cada uno de los primeros polos de las siguientes disyuntivas: pertenencia v. aislamiento, inclusión v. exclusión; participación v. no implicación, reconocimiento v. rechazo, legitimidad v ilegitimidad. Se trata pues de un concepto con varias dimensiones. Bernard (1999) añade a estas dimensiones la de igualdad v. desigualdad.

Aparte de la evidente redundancia definicional, el paralelismo con los conceptos ya manejados anteriormente en el Capital social son evidentes: confianza mutua, reciprocidad, redes extendiéndose a otros como reconocimiento, valores comunes, sentido de pertenencia, solidaridad, inclusión y legitimidad. Ello nos hace concluir que desde el punto de vista de los contenidos hay connotación semántica entre Cohesión social y Capital social. 

Las Cohesión social y la solidaridad

Dentro de esta constelación conceptual es necesario rescatar la idea de solidaridad dada la tradición sociológica del concepto. El mismo Bourdieu (1993) retiene esta idea de Durkeim quien considera la Cohesión social como un rasgo especial ‘ordering feature’ de la sociedad que consiste en la interdependencia entre los miembros de una sociedad y lealtades participadas en la que “…social solidarity is a wholly moral phenomenon which by itself is not amenable to exact observation and especially not to measurement.” (Durkheim, 1893 [1984] pp 24). Para Berman y Phillips (2000) la solidaridad expresa una idea más genérica que la Cohesión social: es la capacidad societal para que las personas permanezcan vinculadas a grupos, colectivos o sociedad. La interdependencia como aspecto formal y la lealtad y solidaridad compartida como contenido, es una connotación importante a retener en la idea de la Cohesión social. Como es bien sabido Durkheim habla de solidaridad mecánica, atribuida a la época preindustrial y la orgánica, propia a una sociedad moderna, diferenciada y compleja en la que el ‘ordering feature’ no sólo se mantiene por poderes de gobierno, sistemas legales, etc. sino que depende además de lealtades participadas.

La diversidad y articulación de diversos Campos como contenido de la Cohesión social

En nuestra visión, la idea de Cohesión social puede tener como contenidos los clásicamente atribuidos al Capital social como confianza, reciprocidad, normas, identidad y valores, redes… y otros de carácter cultural, político, civil, económico, apoyo o valores. Así pues, la Cohesión social se manifiesta en una o con una pluralidad de contenidos o campos sociales. Como en la Capital social la Cohesión social se compone también, además del sustantivo, de una componente formal de redes-relaciones bonding con la densidad como medición, además de otros indicadores; es componente formal permite hablar de intensidad de la Cohesión social para cualquier contenido sea de apoyo, confianza o económicas.  El Cuadro 2 que sigue es revelador de esta diversidad en los campos en los que puede operar la Cohesión social al mismo tiempo que expresa diferencias entre autores.

Componente clave

Jenson (1998)

Kearns y Forrest (2000)

Socio- Cultural

a) Identidad y valores

b) Identidad y pertenencia

Reconocimento/rechazo

Pertenencia/aislamiento

Valores comunes

Identidad/pertenencia

Sociedad civil

a) Participación, interacción

b) Solidaridad

Participación/no implicación

Reconocimento/rechazo

Redes

Solidaridad

Socio- Económico

a) Economía , mercado

b)Trabajo, empleo

Igualdad/desigualdad

(Bernard Paul (1999)

 

Socio- Político

a)  Política

b) Ciudadanía-derechos

Legitimidad/ilegitimidad

Inclusión v. exclusión

Orden y control social

Derechos civiles

Cuadro 2. Los campos de la CoS. Elaboración propia inspirada en Jenson (1998), Forrest y Kearns (2001) y Bernard (1999)

Otra línea de interés que aparece en el Cuadro 3 es la desarrollada por Vranken (2001) sobre la diferenciación, fragmentación, desigualdad y exclusión social. Los criterios que aparecen en el cuadro se refieren a la formación de colectivos diferentes: primero, arriba en horizontal, es una clasificación basada en la existencia de una división entre grupos debido a su carácter jerárquico como poder u otros; segundo, en vertical a la izquierda, el principio de clasificación consiste en si la distinción o diferencia entre grupos es neta o borrosa. De la diferenciación social se puede pasar a la desigualdad social y de la fragmentación a exclusión cuando se establecen principios de división y jerarquía que cortan la relación. Lo interesante es que esta clasificación y articulación nos permite clarificar y precisar conceptos como inclusión en la línea de la Cohesión social como opuesto al de exclusión.

Cuadro 3. La (i)lógica de la exclusión. Elaboración propia a partir de Vranken (2001).

Un colectivo con ausencia de jerarquía social pero con una neta o no neta línea de  clasificación social, es lo que Vranken denomina diferenciación social o fragmentación social. No parece que en los colectivos así generados se dé o sean proclives a una mayor o menor cohesión social; aunque no sería descartable en sociedades donde tal diferenciación fuera un principio de jerarquía social. Por el contrario, si se trata de las dos versiones de la segunda columna, la desigualdad con clara división social por un principio de jerárquica o la exclusión con menos clara o difusa jerarquía, se puede suponer que tales condiciones puede facilitar que en los colectivos así definidos sea posible una mayor o más fuerte Cohesión social por las relaciones internas en los colectivos. A la exclusión social se opone la inclusión pero la inclusión no es exactamente Cohesión social, ni la exclusión la ausencia de Cohesión social.

Una propuesta genérica que articula Capital Social, Cohesión social y Bonding

Vranken (2001), aparte de las consideraciones del precedente apartado, contempla los bonding como inputs internos en un colectivo en tanto que redes que provienen de interacción, comunicación y de marcos comunes, proporcionando valores participados junto a significados y normas comunes; esto es, la Cohesión como forma de estructurar el Capital social. En el caso, las relaciones son horizontales y, además, internas o hacia dentro los colectivos.

Desde nuestra perspectiva, la articulación del Capital social y de la Cohesión social proviene de identificar la Cohesión social como un recurso relacional y distribuido de Capital social en un colectivo, previamente definido sea de individuos, grupos, asociaciones, instituciones, a partir de dichas relaciones bonding. Las relaciones son pues claves en la identidad de la Cohesión social y por tanto de la forma de distribución dentro del colectivo como cantidad, densidad etc. para cualquier contenido de la Cohesión social. Definidos los bonding como formas relacionales  hacia dentro y horizontales, de distribución del Capital social en un colectivo, los bondings generan Cohesión social en su componente formal; sus contenidos son los plurales a la Cohesión social. Así pues la Cohesión social es una forma de distribución interna del Capital social y por tanto lo estructura. La Figura 2 muestra las diferentes posibilidades de Cohesión social y bonding según los colectivos y unidades de que de que se trate.

Figura 2. Bonding y CoS según diferentes tipos de colectivos. Elaboración propia

 

3.2. La Integración social en un sentido genérico[5]

Las dificultades de identificar la Integración social

Definir el contenido de la Integración social presenta idénticas dificultades que las habidas en la Cohesión social, debido a su significado polivalente, utilización política y social, evolución y los cambios sociales temporales y socio-espaciales. La Integración social supone y parte de la existencia de distintos colectivos sociales, previamente definidas sus fronteras así como la naturaleza de sus entidades o unidades, por tanto, la Integración social supone la existencia de roles, atributos, clases, posiciones, grupos, colectivos, asociaciones, familias, instituciones, organizaciones, municipios, etc. diferentes en la sociedad. Veamos algunos aspectos genéricos antes de entrar en nuestra definición vinculando también la Integración social al Capital social.

La Integración social desde la perspectiva de la variedad de roles y como interpenetración de partes

La Integración social ha sido mayoritariamente contemplada como expresión de la posible conjugación de roles diversos y confluyentes en un individuo o conjunto de individuos. Ello puede dar lugar a que se produzcan solapamientos, conflictos y discrepancias entre roles y/o personas pero también a que se pueda dar un mayor  potencial de beneficio mutuo por complementariedad en la variedad de roles y contactos diversificados. Puede así facilitar estrategias de actuación no redundantes. En este sentido se puede afirmar que a mayor acumulación de roles diferentes mayor diversidad relacional y viceversa pero no se ha de olvidar que el aislamiento total es la total pobreza social[6]. La Integración social ha sido considerada también como relación de interpenetración entre partes de un sistema social, sociedad, por procesos de participación e inclusión; en Gough y Olofsson (1999) y en Cantle (2005) como relaciones positivas desarrolladas entre gente de diferentes antecedentes y adquiridos en el lugar de trabajo, escuela, vecinos...

Los contenidos de la Integración social

Como en la Cohesión, la Integración social no tiene un solo campo social como contenido exclusivo: la Integración social de un individuo en un grupo, de un grupo en un colectivo o entre dos grupos, puede tener un contenido económico, cultural, o afectivo, entre otros. Para hablar de Integración social se tienen que delimitar los colectivos, la naturaleza de sus entidades y la sustancia de los contenidos relacionales. La Integración social es una cuestión de vínculos de un colectivo con otros o de relaciones entre colectivos; esto es, de relaciones externas.  

Entzinger y Biezeveld (2003) diferencian diversos tipos de campos como el socioeconómico, cultural, o el político-legal, entre otros. Gualda (2007) propone, una vez revisada la literatura ad hoc, cuatro grandes dimensiones o campos de la InS.[7] En cada uno establece y define, a su vez, diferentes tipos y dinámicas integrativas o de de Integración social: (i) en la dimensión psicosociológica distingue entre aculturación, adaptación, integración, segregación y marginación; (ii) en el político-jurídico-fiolosófico-ético entre enfoques o ideologías políticas como ciudadanía, liberalismo, comunitarismo, republicanismo; (iii) en el campo socio-económico entre integración, exclusión, ciudadanía social; (iv) en el campo sociocultural la asimilación, el melting pot, pluralismo cultural, multiculturalismo, interculturalismo, asimilación segmentada y el trasnacionalismo. Lo que importa resaltar es, de nuevo, la variedad de los campos en los que se puede aplicar la Integración social y su semejanza en este sentido con la Cohesión.

El modelo bien conocido de Berry (1992) y Berry, Kalin y Taylor (1977), recogido a su vez en Gualda (2007) y referido sobre todo a la inmigración, parte de dos colectivos o referentes de pertenecía y se supone que también de referencia: el de la población autóctona y el de la población de acogida o inmigrante. El contenido de referencia del intercambio (o de las relaciones) es sobre todo cognitivo, cultural o sicosociales como identidad, valores, proyectos. El sujeto atributivo es el colectivo inmigrante (Cuadro 4).

Cuadro 4. Modelo de Berry. Tomado de Gualda (2007).

Si para sociedad inmigrante la referencia cognitivo-cultural es tanto la sociedad autóctona como la suya propia tenemos una situación de Integración social; es un  modelo de Integración social y de doble pertenencia, (2); si la referencia es sólo la sociedad de origen sin que lo sea la de acogida o autóctona tenemos un caso de máxima Cohesión social, interna al grupo; es el modelo de Separación, (4); si la referencia no es la sociedad de origen sino la autóctona tenemos un caso de Asimilación, (1); y por fin, si no lo es la sociedad de origen ni la autóctona tenemos un caso de Marginación (3).

Una propuesta genérica para el Capital social, la Integración social y los Bridging/Linking

La definición de la Integración social por la que se opta no se refiere a un contenido sustantivo específico. En este sentido nuestra perspectiva es neutral, lo que posibilita concebirla y aplicarla en diferentes campos sociales. Además, como en el caso de la Cohesión, es necesario identificar previamente las unidades de referencia que son sujeto de relaciones y los colectivos entre los que se definen la Integración social. La Integración social se puede referir así (i) a las relaciones de un individuo con el colectivo de referencia elegido, por ejemplo de un profesor en el Departamento de su Universidad; (ii) de una asociación con el colectivo de asociaciones; (iii) de la clase media con el conjunto de las clases sociales de una población o sociedad; (iv) de un Departamento en la Universidad concebida como un conjunto de Departamentos. Se trata de relaciones entre, inter o hacia fuera.

Vranken (2001) habla de las relaciones Bridging/Linking como interacciones o relaciones que se establecen entre colectivos o grupos a partir de sus relaciones entre o de grup-out, externas o hacia fuera. Las relaciones de Integración social son también una forma de distribución de Capital social de un individuo en un conjunto de individuos o colectivo; de un grupo en un conjunto de grupos o colectivos. La Integración social puede ser gradual o de diferente intensidad y los contenidos también diversos: cognitivo de representaciones mutuas y/o de la inteligencia emocional, en tanto que terrenos de la confianza; de objetivos e instrumentales en las comunidades de prácticas; económicos; de la solidaridad a partir del apoyo mutuo y así sucesivamente. En definitiva, los Bridging/Linking son adecuados indicadores de la Integración social en el sentido genérico tomado, en tanto que son relaciones hacia fuera o externas o entre colectivos. Como tal es una forma de distribución del Capital social desde una perspectiva relacional. Sus contenidos son multidimensionales y pueden atañer a diferentes campos de la vida social que sean son expresables como relaciones.

3.3. La bifurcación necesaria de las relaciones externas o hacia fuera o los dos tipos de InS: la Vinculación social o de Bridging y la Integración social, propiamente dicha o de Linking[8]  

Diversos autores con posterioridad a los clásicos que han manejado los conceptos de Capital social, Cohesión e Integración social, Bondign, Bridging han ido introduciendo distinciones pertinentes en el tratamiento de estas temáticas, (Woolcock, 2000, 2001, 2003; Woolcock y Narayan, 2000; Szreter y Woolcock, 2004;Cheong, Edwards, Goulbourne y Solomos, 2007), contribuciones que trataremos de incorporar en este apartado.

La  primera observación es que si hasta ahora se ha expresado la Cohesión social y el Bonding como relaciones hacia dentro de los colectivos y la Integración social y los Bridging/Linking como relaciones externas o hacia fuera, a partir de ahora las relaciones hacia dentro o intra de los colectivos seguirán con la nomenclatura de Cohesión social y Bonding pero en las relaciones hacia fuera o entre colectivos se establece la distinción entre

·         (i) las que son hacia fuera o entre, pero horizontales, serán las de Vinculación Social o de Bridging y

·         (ii) las relaciones también hacia fuera pero verticales se denominarán de Integración social  y a sus vínculos relacionales, Linking.

Las razones de no haber introducido desde el principio esta subclasificación son, en primer lugar, el respeto a la progresiva aparición de los conceptos y de sus autores y, en segundo lugar, la necesidad de que desde el principio del artículo aparezca de manera diamantina la distinción entre relaciones hacia dentro, o intra, y hacia fuera, o entre, suficiente para determinados autores.

La Vinculación social y sus relaciones Bridging

La Vinculación social o relaciones Bridging, se refieren a relaciones hacia fuera o entre individuos o colectivos aunque horizontales en el sentido de que se trata de relaciones entre individuos o colectivos formados de entidades o agentes de la misma envergadura y/o naturaleza, por ejemplo entre asociaciones, departamentos, instituciones, colectivos de atributos de una misma variable. Son relaciones entre colectivos distintos. La Vinculación social consiste pues en relaciones (interacciones, conectividad, vínculos,..) referida a uno o varios contenidos (confianza, educativos, económicos o apoyo mutuo) que se establecen entre las entidades de dos colectivos diferentes, bien delimitados y definidos en su extensión y frontera. Estas entidades o colectivos pueden ser grupos, organizaciones o instituciones. La Vinculación social es también una cuestión de intensidad, es decir, que se puede hablar de su grado a partir de la densidad y frecuencia de las relaciones entre dos colectivos. Por otro lado, la Vinculación social, desde el punto de vista relacional, es también neutra pues se puede referir a diferentes contenidos o campos. 

Figura 3. Bridging e VnS según diferentes tipos de colectivos. Elaboración propia.

La Figura 3, es indicativa de las posibilidades de Vinculación social. Entre dos colectivos formados por unidades, por ejemplo individuos, entre dos poblaciones por unidades que son colectivos y entre una situación ponderada que abraca las dos precedentes.

La Integración social y sus relaciones Linking

La Integración social propiamente dicha son relaciones hacia fuera pero verticales en el sentido de que se trata de entidades de diferente envergadura social (i) sea porque la referencia de la Integración social de un elemento es el conjunto de todos los elementos del colectivo en que se integra, (ii) sea porque la relación se establece con elementos con mayor grado de poder, prestigio o dominación; en ambos sentidos se denominan relaciones verticales. Conservando la expresión que aparece en la literatura las denominamos relaciones Linking. Se dan tres tipos de Linking o Integración social.

1)    El primer tipo de la InS o Linking

El primer tipo consiste en la relación de un individuo con respecto a la totalidad de individuos de un conjunto más amplio o de un grupo en la totalidad de los grupos de un colectivo también más amplio. Con todo, los individuos (o grupos) que se integran y en el que (o en los que) se integran son de la misma naturaleza, peso o ‘importancia’ social; es decir, en prestigio, poder o estatus. La Figura 4 muestra este tipo de Linking o Integración social. El primer caso, el de una persona en un conjunto formado por personas; en el segundo, de un grupo en un colectivo de grupos. Desde luego, es una relación hacia fuera pero se trata también de una relación vertical pues la referencia es con respecto a la totalidad en que se integra. Las entidades de las que se predica su Integración son individuos, grupos, asociaciones, organizaciones, instituciones, países... Los colectivos con relación a los que se estudia su Integración son totalidades o conjuntos de dichas entidades.  Para que se dé la condición de Integración es necesario que la relación sea con la totalidad posible de miembros del colectivo en el que se integra; si es parcial o relativamente parcial se aboca a la Vinculación social. 

Figura 4. Primer tipo de Linking o de InS según diferentes tipos de colectivos. Elaboración propia.

2) El segundo tipo de Integración social o Linking

Los colectivos  en los que individuos o grupos se integran contienen unidades o entidades de diferente envergadura social es decir con grados de jerarquía en su desigualdad como poder, prestigio, estatus, económico, político o administrativo. Se puede tratar de una persona en un colectivo de personas o de un grupos en un colectivo de grupos (o colectivos) (Figura 5). En este sentido, además de ser una relación hacia fuera, lo es también vertical con respecto a una parte o la totalidad del colectivo. De nuevo las entidades de base de las que se predican su integración pueden ser individuos, grupos, asociaciones, organizaciones, instituciones o países. El sentido de tal Integración consiste en la obtención de recursos de una jerarquía social superior.

Figura 5. Segundo tipo de Linking o de InS según diferentes tipos de colectivos. Elaboración propia.

3) El tercer tipo de Integración social o Linking

En este tipo de Integración social o Linking consiste en la relación de personas u otras entidades, no a partir de las relaciones entre personas sino con entidades de naturaleza institucional, organizativa, por ejemplo de una persona con respecto a la institución sanitaria, laboral, educativa, ayuntamiento, entidad asociativa... La Figura 6 lo representa.  Se trata pues de una Integración social hacia fuera y también vertical. Se supone que dichas entidades meso o macro poseen recursos superiores o de otro nivel que el individual en Capital social de diversos campos y que, sea por obligación, motivaciones diversas, altruismo etc., estas entidades disponen y redistribuyen entre los individuos.   

Figura 6. Tercer tipo de  Linking o de InS según diferentes tipos de colectivos. Elaboración propia.

Conclusiones

En el esquema de la Figura 7 aparece un modelo conceptual y operativo de Cohesión social, (Bonding), Vinculación social (Bridging) e Interación social (Linking) como forma de distribución del Capital social. Todas las explicaciones precedentes abocan a este modelo. El subcuadro superior de la parte central visualiza los diferentes contenidos de campos o contenidos posibles, tanto de capitales como de la Cohesión social, Vinculación social e Integración social.  El subcuadro inferior representa, en sus similitudes y diferencias la estructura de relaciones dinámicas entre las tres formas de distribución de Capital social. La parte izquierda de la Figura 7 expresa, en el cuadro superior, los diferentes niveles, sean contextos o agentes en que puede operar esta dinámica, y además no de manera integrada; es decir, interactuando entre niveles. La parte central, muestra que las interacciones o relaciones pueden ser acciones interactivas objetivadas o cognitivas como representaciones, estrategias, etc.; la parte inferior que los procesos o mecanismos son instrumentales o expresivos.

Figura 7. Modelo general. Elaboración propia.

 

Bibliografía

Adler, P. S.; Kwon  S.W. (2000). “Social Capital. The Good, the Bad, and the Ungly” en Lesser E.L. Knowledge and Social Capital. Butterworth Heinemann. Woburn MA.

Adler, P. S.; Kwon  S.W. (2002). “Social Capital: Prospects for a New Concept”, Academy of Management Review, 27(1): 17-40.

Amin, A. (2002). “Ethnicity and the multicultural city: living with diversity”, Environment andPlanning, 34: 959-980.

Arneil, B. (2006). “The meaning and utility of social capital in liberal democratic politics”, en Edwards, R.; Franklin J.; Holland J. (eds) Assessing Social Capital: Concept, Policy and Practice, Cambridge Scholars Press.

Atria, R. (2003). “Capital social: concepto, dimensiones y estrategias para su desarrollo”, en Atria R. (CEPAL); Siles M. (MSU); Arriagada I. (CEPAL); Robison L.J. (MSU); Whiteford S. (MSU). Capital social y reducción de la pobreza en América Latina y el Caribe: en busca de un nuevo paradigma. Libros de la CEPAL Santiago de Chile.

Baker, W. (1990). ”Market networks and corporate behavior”, American Journal of Sociology, 96: 589-625.

Baker, W.E.; Obstfeld D. (1999). “Social capital by design: Structures, strategies, and institutional context”, en Leenders; Gabbay (eds.), Corporate Social Capital and Liability, Boston: Kluwer, pp.88-105.

Beck, W.; van der Maesen L.; Walker A. (1997) “Social quality: from issue to concept” en Beck, W.; van der Maesen L.; Walker A. (eds) The Social Quality of Europe. The Hague, Kluwer Law International, pp. 263-297.

Ben-Tovim, G. (2002). “Community cohesion and racial exclusion: a critical review of the Cantle Report”’, Renewal 10( 2): 43-48.

Berman, Y.; Phillips D. (2000). “Indicators of social quality and social exclusion at national and community level”, Social Indicators Research, 50(3): 329-350

Bernard, P. (1999). Social Cohesion: A Dialectical Critique of a Quasi-Concept?, Ottawa: Strategic Research and Analysis Directorate, Department of Canadian Heritage.

Berry, J. (1992). “Acculturation and Adaptation in a New Society”. International Migration, 30: 69-85.

Berry, J.W.; Kalin R.; Taylor, D.(1977). Multiculturalism and ethnic attitudes in Canada. Otawa, Minister of Suply and Services.

Borgatti, S.P.; Everett M.G.; Shirley P.R. (1990). “LS sets, lambda sets and other cohesive subsets”, Soc. Networks 12:337–57

Bourdieu, P. (1986). “The Forms of Capital,” en Richards J.G. (ed.), Handbook of Theory and Research for the Sociology of Education, New York: Greenwood Press, pp. 241-258.

Bourdieu, P. (1993). Sociology in Question, Sage, London.

Bourdieu, P.; Wacquant L. (1992). An Invitation to Reflexive Sociology, Chicago: University of Chicago Press.

Brehm, J.; Rahn W. (1997). ”Individual-Level Evidence for the Causes and Consequences of Social Capital,” American Journal of Political Science 41:999-1023

Burt, R.S. (1992). Structural Holes: The Social Structure of Competition, Cambridge, MA:Harvard University Press.

Burt, R.S. (1997). "The contingent value of social capital",  Administrative Science Quarterly, 42: 339‑365.

Cantle, T. (2005). Community Cohesion: A New Framework for Race and Diversity,  Basingstoke: Palgrave Macmillan.

Castell, M. (1997). The Power of Identity, Oxford: Blackwell.

Cheong, P.; Edwards, R.; Goulbourne, H.; Solomos, J. (2007). “Immigration, Social Cohesion and Social Capital: A Critical Review”, Critical Social Policy, 27: 24–49.

Chiasi, A.M. (2004). “Social Cohesion and related Concepts”, en  Genov H., Avances in Sociological Knowledge. Verlag für Socialwissenschaften pp. 205-218

Coleman, J.(1988). “Social Capital in the Creation of Human Capital”, American Journal of Sociology , 94: 95-120.

Coleman, J. (1990). Foundations of Social Theory, Cambridge, MA: Harvard University Press.

Durkheim, E. (1893) 1984. The Division of Labor in Society, translated by G. Simpson. New York: Free Press.

Entzinger, H.; Biezeveld R. (2003). “Benchmarking in Immigrant Integration”  European Commission under contract No. DG JAI-A-2/2002/006. European Research Centre on Migration and Ethnic Relations (ERCOMER).

Festinger, L.; Schachter S.; Back K.W. (1950). “Social Pressures in Informal Groups: A StudyAnnu. Rev. Sociol. 2004.30:409-425.

Flores, M.; Rello F. (2002). “Capital social: virtudes y limitaciones”, En  (Compiladores) Atria R. (CEPAL); Siles M. (MSU); Arriagada I. (CEPAL); Robison L.J.(MSU); Whiteford S. (MSU). “Capital social y reducción de la pobreza en América Latina y el Caribe: en busca de un nuevo paradigma”, Cap V. pp. 203-228 Comisión Económica para América Latina y el Caribe Universidad del Estado de Michigan Santiago de Chile, enero de 2003. Ponencia presentada en la Conferencia Regional sobre Capital Social y Pobreza. CEPAL y Universidad del Estado de Michigan, Santiago de Chile, 24-26 sep. 2001.

Forrest, R.; Kearns A. (2001). Social cohesion, social capital and the neighbourhood”, Urban Studies, 38(12): 2125-2143

Frank, K. A. (1995). "Identifying Cohesive Subgroups." Social Networks 17:27-56.

Fukuyama, F. (1995). Trust, the social virtues and the creation of prosperity. London: Penguin Books.

Fukuyama, F. (1997). “Social capital and the modern capitalist economy: Creating a high trust workplace”, Stern Busi-ness Magazine, 4(1).

Gough, I.; Olofsson G. (Eds). (1999). Capitalism and Social Cohesion, Basingstoke: Macmillan.

Granovetter, M. (1973). "The Strength of Weak Ties", American Journal of Sociology, 78 (6) (1360-1380).

Granovetter, M. (1974). Getting a Job: a study of contacts and careers, Cambridge, Mass: Harvard University Press.

Gross, N.; Martin W.E. (1952). "On Group Cohesiveness", American Journal of Sociology, 52: 546-54.

Gualda, Caballero, E. (2007) Integración Social de los inmigrantes y modelos  teóricos que la explican, Universidad de Huelva, España

Halpern, D. (2005). Social Capital, Cambridge: Polity Press Cambridge.

Hope C.P.; Edwards R.; Goulbourne H.; Solomos J. (2007). “Immigration, Social Cohesion and Social Capital”, Critical Social Policy, SAGE Publications Ltd  27(1)

Inglehart, R. (1997). Modernization and Postmodernization: Cultural, Economic, and Political Change, Princeton, NJ: Princeton University.

Jeannotte, M. S. (2003). Social Cohesion: Insights from Canadian Research. Ottawa: Strategic Research and Analysis Directorate, Department of Canadian Heritage.

Jenson, J. (1998). “Mapping Social Cohesion: The State of Canadian Research.” Canadian Policy Research Network (CPRN) Study No. F|03, Ottawa, Canada.

Johanson, J. (2001). “The Balance of Corporate Social Capital” en Gabbay, S.M.; Leenders, R.A.J. (Ed.), Research in the Sociology of Organizations, Stamford, CT: JAI Press 18:1-20.

Kearns, A.; Forrest, R. (2000). “Social cohesion and multilevel urban governance”, Urban Studies, 37( 3-6): 995-1017

Knack, S.; Keefer P. (1997). “Does Social Capital Have An Economic Payoff? A Cross Country Investigation”, Quarterly Journal of Economics, 112(4): 1251-1288.

Knoke, D. (1999). “Organizational networks and corporate social capital” en Leenders R. Th.; Gabbay S.M. (eds.) Corporate social capital and liability, Boston: Kluwer, pp-17-20.

Levi, M. (1998). “A State of Trust” en Braithwaite V.; Levi M. (eds.) Trust & Governance. New York: Russell Sage Foundation

Lin, N. (1999). “Building a Network Theory of Social Capital” Connections, 22(1):28-51.

Lin, N. (2001). Social Capital: a theory of social structure and action. Cambridge: Cambridge University Press.

Loury, G. (1992). “The economics of discrimination: Getting to the core of the problem”, Harvard Journal for African American Public Policy. 1(1): 91-110

Lozares, C. (1996). “La teoría de redes sociales”, Papers,  nº48 (103-126).

Lozares, C. (2003) “Valores, campos  y capitales sociales” en  Revista hispana para el análisis de redes sociales. ISSN 157 9-0189. (Revista electrónica) Vol. 4. #2.

Lozares, C. (2006). “Valores, Campos y Capitales sociales”, Redes. Volumen especial, Bellaterra: Publicaciones UAB, pp. 51-89

Lozares, C. (2008). “El capital social dentro y fuera del centro educativo a través del análisis de redes”. Revista de Educación, pp.299-324. Ponencia. Actas del XIV Congreso Nacional y III Iberoamericano Pedagogía. ISBN: 978-84-691-5628-5. Zaragoza

Luhmann, N. (1988) “Familiarity, confidence, Trust: Problems and Alternatives” en Gambetta D. (ed.) Trust: Making and Breaking Cooperative relations, Oxford: Basil Blackwell pp. 94-107.

Marti, J.; Lozares C., (2008). “Redes organizativas locales y capital social: Enfoques complementarios desde el análisis de redes sociales Portularia”, Revista de Trabajo Social. Universidad de Huelva VIII(1): 23-39.

Moody, J.; White D .R (2003). “Social Cohesion and Embeddedness: A hierarchical conception of social groups”, American Sociological Review, 68:107-127

Mudrack, P. E. (1989). "Defining Group Cohesiveness: A Legacy of Confusion?" Small Group Behavior 20:37-49.

Nahapiet, J.; Ghoshal S. (1998). “Social Capital, Intellectual Capital and the Organizational Advantage”, Academy of Management Review. 23(2): 242-266

Narayan, D. (1999). Bonds and Bridges: Social capital and poverty, Word Bank, Washington DC.

O'Reilly, C. A.; Roberts K.H. (1977). "Task Group Structure, Communication and Effectiveness in Three Organizations", Journal of Applied Psychology 62:674-81.

Pennar, K. (1997). “The ties that lead to prosperity: The economic value of social bonds is only beginning to be measured”, Business Week, 15: 153-155,

Portes, A. (1998). “Social capital: Its origins and application in modern sociology”, Annual Review of Sociology, 24, 1-24.

Portes, A.; Landolt P. (1996). “The downside of social capital”, The American Prospect,7. Available at www.prospect.org/print-friendly/print/V726/26-cnt-2.html/

Portes, A.; Sensenbrenner, J. (1993). “Embeddedness and Immigration: Notes on the Social Determinants of  Economic Action.” American Journal of Sociology 98:1320–50.

Pöyhönen, A. (2005). “Exploring the Dynamic Dimension of Intellectual Capital: Renewal Capability, Knowledge Assets and Production of Sustained Competitive Advantage”, A paper presented at the 2005 PMA IC Symposium: Management and Measurement of Intangible Assets and Intellectual Capital: Multidisciplinary Insights. New York, 15-16 December 2005.

Putnam, R. (1993). “The prosperous community: social capital and public life”, The American Prospect, 13.

Putnam, R. (2001). “Le déclin du capital social aux Etats-Unis. Entretien avec Robert Putnam”, Sciences Humaines 33: 63.

Putnam, R. D. (1995). “Bowling alone: America’s declining social capital”, Journal of Democracy,  6(1):65-78.

Salmon, H. (2002). “Social capital and neighbourhood renewal”, Renewal 10(2): 49-55.

Sandefur, R.L.; Laumann E.O. (1998). “A paradigm for social capital, flationaiity and Society, 10: 481-501

Schuster, L., Solomos J.(2004) Race, immigration and asylum: New Labour's agenda and its consequences. Ethnicities, 4 (2). pp. 267-300. ISSN 1468-7968

Szreter, S.; Woolcock M. (2004). “Health Social capital, social theory and the political economy of public health”. Int J Epidemiol,  33:650–667.

Thomas, C, Y, 1996, Capital markets, financial markets and social capital. Social and Economic Studies, 45(2 & 3): 1-23

Vranken, J. (2001). “No Social Cohesion without Social Exclusion?” Research Unit on Poverty, Social Exclusion and the City, University of Antwerp, at http://www.shakti.uniurb.it/eurex/syllabus/lecture4/Eurex4-Vranken.pdf.

Winter, I. (2001)  Towards a theorised understanding of family life and social capital. Working Paper No. 21, April 2001. Australian Institute Family Studies.

Woolcock, M. (1998). “Social capital and economic development: towards a theoretical synthesis and policy framework”, Theory and Society, 27: 151-208.

Woolcock, M. (2000) ‘Why should we care about social capital?’, Canberra Bulletin of Public Administration, No. 98, pp. 17-19.

Woolcock, M. (2001) “The Place of Social Capital in Understanding Social and Economic Outcomes”. Isuma. Volume 2, Number 1.

Woolcock, M. (2003). “Diversity as opportunity and challenge: the role of social capital theory, evidence and policy”, presentation to the Policy Research Initiative Conference, Montreal.

Woolcock, M.; Narayan N. (2000). “Social Capital: Implications for Development Theory, Research and Policy”, The World Bank Research Observer, 15(2): 225-249.

Woolley, F. (1998). Social Cohesion and Voluntary Activity: Making Connections. Paper. presented at the —CSLS Conference on the State of Living Standards and the Quality of Life in Canada,“ October 30-31. Ottawa. At http://www.csls.ca/oct/wool.pdf.

 



* Este artículo corresponde a la investigación que tiene como referencia CSO2008-01470, subvencionada por el MiCINN dentro del marco del VI Plan Nacional de Investigación Científica, Desarrollo e Innovación Tecnológica 2008-2011. Los autores de este artículo pertenecen a dicho proyecto.

[1] Enviar correspondencia a Carlos.lozares@uab.cat, Centre d’Estudis Sociològics sobre la Vida Quotidiana i el Treball (QUIT). Departament de Sociologia. Universitat Autònoma de Barcelona. 08193. Bellaterra. Cerdanyola del Vallès (Barcelona). Tel: 93.581.2405  / 93.581.1676 . Fax: 93.581.2827.

[2] Egolab-GRAFO (www.egolab.cat).

[3]  Por ahora no se hace la distinción entre Bridging y Linking. En este aparado 2 se tomarán ambos genéricamente como relaciones hacia fuera del colectivo en cuestión, entre o inter-colectivos, sean entre individuos de distintos colectivos, sea entre las mismos colectivos como entidades en sí.  En el apartado 3.3. se hará una distinción entre Bridging y Linking, lo que acarreará la diferencia entre Vinculación e Integración. 

[4] Por ahora como se señalaba en la nota 3, se tratan los Bridging/Linking conjuntamente, en el apartado 3.3. se definirán y tratarán diferencialmente.   

[5] Tal y como anunciábamos en notas previas no se ha hecho hasta ahora la distinción entre Bridging y Linking como tampoco lo hacemos entre Vinculación social e Integración social. Esta distinción se hace a partir del apartado 3.3, Así pues las consideraciones que se hacen en 3.2. pueden referirse conjuntamente a la Integración/Vinculación social. Si guardamos por ahora la expresión de Integración social para expresar el dúo Interación/Vinculación es porque la expresión de Integración es más habitual.

[6] No se ha de olvidar con Gramsci y Bourdieu que la InS puede ser inducida en la sociedad por el rol dominante de una clase o élite, por el uso del poder o hegemonía cultural y que los mecanismos de integración pueden ser valores, creencias y socialización compartidas o cultura participada.

[7] Nosotros guardaremos los recogidos en la Cohesión social, precisamente por posibilidades comparativas, pero guardan similitud con los propuestos por Gualda.

[8] A partir de aquí establecemos la distinción anunciada entre Bridging (relaciones hacia fuera o entre pero horizontales) y los Linking (como relaciones hacia fuera o ente pero verticales).